El margen

El margen es lo que está al lado, apartado, lo que marca una separación entre dos cosas, dos sectores, dos espacios o mundos.

Recientemente, me di cuenta de que he pasado mucho tiempo viviendo al margen de mi vida. No marginalizado sino al margen.

Vivir al margen de su vida es estar presente pero ver lo todo desde fuera. Ver como algo puede ser difícil para algunos, como, al contrario, todo puede llegara ser tan fácil para los demás.

Pero tú, ¿dónde estás? Al margen. Viendo las cosas, a la gente. Quieres acercarte, pero te quedas aislado. A veces te acercas bastante para que noten tu presencia, te invitan a franquear ese limite que te mantiene al margen, y entonces ¿qué? O lo cruzas o lo vas retorciendo, es decir, te acercas a este lado del margen que quieres conocer y vivir, pero no vas hasta ahí, aunque muy cerca. Te acomodas con el margen, o vas deformando el margen para poder circular este mundo, pero pasas y ya.

Hace poco me di cuenta de que conocía a gentes geniales. Esa gente con quien iba compartiendo cosas, horas de la semana. Quería conocerles pero que diría entonces... de mi lado del margen, no hace falta hablar, solo se escucha, uno se queda presente.

Te llaman, que vayas con ellos, esa gente que quieres conocer. Pero te quedas detrás de esta línea, inmóvil, silencioso, te vas haciendo transparente, no invisible, poque sienten y saben que estás ahí, cerca. Te llaman otra vez, vas o te quedas.

En mi caso demasiadas veces decidido quedarme, sabiendo muy bien que no es lo que quiero de verdad. Pero como podría ir hacia los demás, si se lo están pasando tan bien. Yo también quiero, pero no me dejo. No quiero molestar.

Me lo pierdo es cierto. ¿Qué gano? Más envidias, más soledad. Entonces ¿por qué tanto me ato a ese lado del margen?

¿La razón? Timidez la llamo a veces, otras veces la llamo estupidez. Porque al final es lo que es. Voy buscando excusas a mi estupidez, disfrazándola de actitudes e imágenes que remiten todas a lo mismo.